Este jueves 11 de septiembre se desarrollaron en 22 ciudades del país contundentes marchas que movilizaron a miles de ecuatorianos y ecuatorianas, junto a organizaciones como: UNE, FUT, Frente Popular, CONAIE, Frente en Defensa de la Salud, la Educación Pública, el Trabajo Digno, los Derechos Humanos y la Naturaleza, Federación Médica, estudiantes, jubilados, enfermeras, ecologistas, comerciantes, entre otras organizaciones. Nos movilizamos para frenar los despidos, defender las fuentes de trabajo, exigir medicinas, que se declare en emergencia la salud, educación y se garantice seguridad desde el Estado. Fue una jornada victoriosa que incomodó al Gobierno, que respondió con represión en Quito y Zamora, agrediendo a mujeres, jóvenes y periodistas.
Mientras tanto, el gobierno realizó en Guayaquil una contramarcha financiada con fondos públicos, destinados a garantizar medicinas, especialistas en hospitales o planes de reinserción escolar. Una contramarcha que estuvo escoltada por cientos de militares y policías, ausentes en barrios y escuelas golpeadas por la inseguridad y el microtráfico.
La diferencia es evidente: un pueblo unido y consciente frente a un gobierno mentiroso, incapaz y autoritario. Por ello, ratificamos las jornadas de movilización para el 16 de septiembre en Azuay, en defensa del agua, la vida y Quimsacocha y el 18 de octubre en Guayaquil en el Congreso Nacional en Defensa del IESS y la seguridad social.
