Es de conocimiento público que los sectores más pudientes y gobiernos de turno han buscado siempre eliminar los subsidios vigentes con el argumento de que su entrega no es eficiente, dado que “buena parte de ellos beneficia a grupos de personas que no los necesitan”.
Sin embargo, lo que realmente sucede es que detrás de la supuesta preocupación está lo que como UNE advertimos meses atrás: el Gobierno busca seguir aplicando un ajuste fiscal de aproximadamente el 4,4% del PIB (más de USD 5.600 millones), en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Para alcanzar este ajuste el Gobierno se comprometió a realizar, entre algunas cosas: Una reforma tributaria estructural; eliminación de subsidios; reformas energéticas y productivas; cambios a la seguridad social; reformas financieras.
Bajo esta intención, el Gobierno de Noboa, que en campaña ofreció no eliminar el subsidio al diésel, hoy lo hace, subiendo el precio del galón de USD 1,80 a USD 2,80 (un incremento de más del 50%). Aumento que desde UNE rechazamos. Es necesario recordar que el precio de la gasolina Extra y Ecopaís también subió de precio en estos días a un valor de $2.879 por galón.
Noboa no entiende que ya no da más el bolsillo del pueblo, que suben los combustibles y sube todo. El propio Banco Mundial en su último informe sobre Ecuador señaló que el 30% de ecuatorianos están en peligro de caer en pobreza. Por su parte, el INEC determina que el 40,8% de la población nacional sufre pobreza multidimensional (7,4 millones de personas sufren graves carencias y privaciones). El 28,0% de la población nacional, es decir, 5,1 millones de personas viven en pobreza grave con menos de USD 3,0 diarios; y el 12,7% de la población nacional, 2,3 millones de ecuatorianos, sobreviven en pobreza extrema con menos de USD 1,7 diarios.
Por más que el Gobierno señale que se entregarán compensaciones (bonos) o que no “subirán los pasajes”, esto no es otra cosa que distractores y falsas promesas. Así como las de la Ley Orgánica de Integridad Pública (LOIP), donde afirmó que no iba a despedir a médicos, profesores y lo está haciendo.
Mientras el Gobierno elimina el subsidio al diésel para ir a un Ecuador “más justo”, el grupo Noboa dejó de pagar más de 70 USD millones al SRI, producto de la última remisión tributaria establecida en la LOIP. Sin embargo, la eliminación del subsidio al diésel es un duro golpe al transporte comunitario, público, escolar; ya que la movilidad entre el sector urbano y rural es diversa, es un duro golpe a las actividades turísticas y productivas, es un garrotazo al costo de vida que se incrementará aún más, después del alza del IVA.
Razones por las cuales, desde la UNE, extendemos nuestro llamado unitario al FUT, CONAIE, Frente Popular, sectores del transporte y demás organizaciones sociales para enfrentar este segundo paquetazo del Gobierno con unidad, lucha, organización y confluir de manera inmediata en una reunión unitaria que permita definir diferentes acciones.