
Desde la Unión Nacional de Educadores (UNE) advertimos que el gobierno de Daniel Noboa no busca el diálogo ni la solución a las demandas de los sectores populares. Su única respuesta ha sido la represión y el intento de frenar la movilización social.
Expresamos nuestra solidaridad con el pueblo que, en estos días de lucha, ha sido golpeado, reprimido y vulnerado en sus derechos fundamentales.
El martes 30 de septiembre, la Policía Nacional reprimió brutalmente a jóvenes que realizaron un plantón pacífico en la Universidad Central, con la participación de artistas y estudiantes comprometidos con la realidad del país. Camiones militares cercaron la zona, se clausuraron paradas del Metro para impedir el libre tránsito y periodistas de Only Pans, Telesur y BN fueron agredidos, incluso después de identificarse como prensa.
Denunciamos con firmeza la violencia desatada por este gobierno contra los sectores populares. Exigimos que la misma fuerza que hoy se despliega para golpear y encarcelar al pueblo sea utilizada para combatir a la delincuencia que mantiene con miedo a la sociedad ecuatoriana.
Reiteramos nuestro llamado a la Corte Constitucional a pronunciarse frente al inconstitucional decreto 134, que impone un estado de excepción arbitrario y vulnera los derechos a la organización, movilización y resistencia. Lo sucedido en la Universidad Central es consecuencia directa de este decreto y refleja con claridad la política autoritaria y represiva de Noboa.